Tratamiento de la osteocondrosis de la región torácica.

No se habla de osteocondrosis de la columna torácica con tanta frecuencia como de osteocondrosis lumbar o lumbosacra. Este diagnóstico es relativamente raro. El hecho es que la columna torácica está menos cargada y el corsé muscular en esta zona está mucho mejor desarrollado que en la zona lumbar.

El diagnóstico y tratamiento de la osteocondrosis de la columna torácica es difícil porque los síntomas de la enfermedad a menudo permanecen ocultos y además son similares a los que ocurren con los problemas cardíacos. Por tanto, en este caso, la selección correcta y oportuna de los métodos de diagnóstico es especialmente importante.

¿Qué es la osteocondrosis torácica?

La osteocondrosis de la columna torácica pertenece a las enfermedades degenerativas del aparato osteocondral del cuerpo. La degeneración (envejecimiento y destrucción) comienza con una nutrición inadecuada y deshidratación del disco intervertebral. El tejido se vuelve más débil y delgado y pueden producirse crecimientos óseos en las vértebras.

Diferencia entre un disco sano y un disco con osteocondrosis

Bajo la influencia de cargas mecánicas, la parte central del disco similar a un gel puede filtrarse a través de la estructura no fibrosa del anillo exterior del disco. Durante el proceso se produce una fractura intervertebral.

La distancia entre las vértebras disminuye, se pellizcan las raíces de los nervios espinales o los vasos sanguíneos y se produce un dolor punzante intenso. El proceso patológico puede extenderse a otras partes de la columna. Sin un tratamiento oportuno, la afección empeora y puede provocar discapacidad.

Razones para aparecer

Curvatura de la columna (escoliosis)Es una de las principales causas de la osteocondrosis torácica. Y dado que los principales procesos de formación de tejido óseo y cartilaginoso ocurren en la infancia y la adolescencia, los requisitos previos para esta enfermedad degenerativa surgen entre los 15 y 16 años.

Factores genéticos puede provocar tanto escoliosis como osteocondrosis torácica en sí. Una debilidad hereditaria de los huesos, cartílagos y músculos conduce al envejecimiento prematuro de la columna y a la destrucción de los discos intervertebrales.

Lesiones de columna Las cargas de fuerza excesivas también pueden provocar osteocondrosis de la región torácica.

Trastornos metabólicos y circulatorios, enfermedades endocrinas. Contribuir al deterioro de la nutrición del disco intervertebral. Esto conduce al desarrollo de osteocondrosis.

Sobrepeso generalmente tiene un efecto negativo sobre el estado de órganos y tejidos. El aumento del estrés prolongado en la columna y un estilo de vida sedentario son factores que influyen en la aparición de osteocondrosis torácica.

Primeros signos y síntomas principales.

  • El dolor de espalda en la zona del omóplato es el síntoma principal y uno de los primeros signos de osteocondrosis torácica. Se caracteriza por un dolor sordo y doloroso que aumenta con el movimiento y la respiración. El dolor puede ser agudo y empeorar por la noche.
  • Dolor en la zona del corazón. La osteocondrosis de la región torácica puede causar dolor agudo y ardiente, dolor a la izquierda del esternón, como en la angina y el ataque cardíaco.
  • Entumecimiento, sensación de frío, hormigueo, picazón en la espalda y extremidades.
  • dolor de estómago. La osteocondrosis torácica a menudo se disfraza como síntomas que, a primera vista, no tienen nada que ver con la enfermedad. Por ejemplo, si la parte superior de la columna torácica se ve afectada, habrá dolor en la garganta y el esófago, así como sensación de un nudo en la garganta. La parte media de la región torácica se caracteriza por dolor en el hipocondrio derecho, similar a un síntoma de enfermedades pancreáticas. El dolor se produce en la zona inferior del pecho, como si hubiera disfunción intestinal.

Etapas de la osteocondrosis de la región torácica.

La osteocondrosis de la región torácica se caracteriza por cuatro etapas de desarrollo.

Primera etapa. En primer lugar, el disco intervertebral pierde su fuerza y elasticidad. Pueden producirse sensaciones desagradables, malestar y dolor con determinadas posiciones y movimientos del cuerpo.

Segunda etapa. Se desarrollan grietas en el disco intervertebral. Comienza el proceso de formación de hernia. La compensación de la inestabilidad de la columna torácica puede provocar calambres musculares. Se produce dolor intenso en el pecho, las extremidades y la espalda.

Tercera etapa. Una hernia inguinal se produce debido a una rotura de los discos intervertebrales. Puede comprimir las raíces espinales y los vasos sanguíneos. El dolor se vuelve constante, intenso, puede ser doloroso o puede aumentar con el movimiento.

Cuarta etapa. En el disco intervertebral, el tejido cartilaginoso se reemplaza por tejido óseo; El disco ya no puede cumplir su función de amortiguación. Es posible la formación de crecimientos óseos en la superficie del disco intervertebral (osteofitos). La osteocondrosis puede extenderse a los discos intervertebrales vecinos. Debido al dolor intenso y la movilidad limitada de la columna torácica, la calidad de vida se reduce significativamente. El empeoramiento de la afección puede provocar discapacidad.

diferentes etapas de la osteocondrosis torácica

diagnóstico

La osteocondrosis torácica a menudo no se reconoce inmediatamente debido a síntomas vagos, por lo que existe un gran riesgo de que un diagnóstico inicialmente erróneo.

Si tiene dolor en el pecho o la espalda que se produce al respirar, consulte primero con un cardiólogo y un neurólogo. Si el cardiólogo descarta una enfermedad cardíaca, el neurólogo realizará un diagnóstico. Si se sospecha osteocondrosis, se utilizan radiografías, tomografía computarizada y resonancia magnética para confirmar el diagnóstico.

Radiografía. Sólo ayuda a evaluar el estado de las estructuras óseas; Los tejidos blandos y el cartílago no se muestran en las imágenes. Para visualizar estas estructuras se inyecta un agente de contraste: angiografía, discografía, mielografía.

Tomografía computarizada (TC). Este método también utiliza el principio de la radiografía, pero con la ayuda del procesamiento informático es posible obtener una serie de imágenes de cortes longitudinales y transversales en las que se puede ver el tejido óseo y cartilaginoso.

Imágenes por resonancia magnética (MRI). Es el "estándar de oro" en el diagnóstico de la osteocondrosis, ya que permite examinar en detalle el daño no sólo a los huesos, sino también a los tejidos blandos circundantes.

Tratamiento de la osteocondrosis de la columna torácica.

Para tratar la osteocondrosis de la columna torácica se suelen utilizar métodos conservadores. Esto incluye medicación y fisioterapia. En casos extremos, se realiza tratamiento quirúrgico.

Métodos no quirúrgicos para tratar la osteocondrosis.

El tratamiento de la osteocondrosis es un proceso complejo y largo. Tienes que tener paciencia. El tratamiento conservador incluye tanto métodos terapéuticos como cambios en el estilo de vida.

El énfasis está en eliminar el dolor, aliviar la inflamación, restaurar las funciones de las raíces espinales y fortalecer el corsé muscular y el aparato ligamentoso.

El alivio del dolor se logra mediante tratamiento farmacológico. Durante la exacerbación de la enfermedad, se lleva a cabo una terapia con medicamentos.

El tratamiento no quirúrgico complejo incluye diversos procedimientos fisioterapéuticos destinados a estimular el proceso de autocuración del cuerpo. Los mecanismos de protección localizan y restauran funciones deterioradas por el proceso patológico.

La recuperación es gradual, por lo que no debes esperar un efecto rápido. El proceso de desarrollo de la osteocondrosis de la columna torácica fue largo y su tratamiento requiere tiempo.

Fisioterapia es un tratamiento basado en factores físicos naturales y recreados artificialmente (frío, calor, corriente eléctrica, radiación magnética, láser, etc.). La fisioterapia utiliza equipos, dispositivos y técnicas manuales especiales.

Kinesiterapia - Terapia de ejercicio. Puede ser activo (fisioterapia) y pasivo (masajes, tracción). La terapia con ejercicios se selecciona teniendo en cuenta las características individuales del paciente y está destinada a fortalecer los músculos de la espalda. La tracción ayuda a aliviar el dolor y la tensión muscular.

Terapia manual y masaje. — Métodos para influir en los tejidos blandos y las articulaciones para restaurar el tono muscular. Restaura eficazmente la movilidad y elimina el dolor.

Grabación, cinta Kinesio - un método para aplicar parches elásticos especiales sobre la piel en lugares donde es necesario influir en los receptores de compresión y estiramiento de los músculos. Una forma de relajar o mejorar el tono muscular.

Terapia con láser (tratamiento con luz) — activación biológica de los procesos de regeneración de los discos intervertebrales. Se inician los procesos de regeneración y restauración de tejidos.

Terapia con plasma (terapia PRP)- Inyecciones de su propio plasma purificado. Aumenta la inmunidad local y se inician procesos de regeneración.

Reflexología, acupuntura, acupuntura. - Estimulación de terminaciones nerviosas con agujas especiales. El metabolismo de las zonas afectadas mejora y el paciente deja de sentir dolor.

Terapia de ondas de choque Utiliza ondas de frecuencia extremadamente alta que provocan resonancias en el tejido corporal. Le permite iniciar procesos de recuperación natural.

A veces se utiliza un corsé ortopédico. Si los músculos no están lo suficientemente desarrollados, el corsé compensa parcialmente la carga sobre la columna y alivia la afección aguda.

Es importante cambiar el estilo de vida de una persona, agregar actividad física y una dieta equilibrada. El efecto positivo del tratamiento conservador se produce en 2-3 meses. Si dicho tratamiento es ineficaz, se realiza tratamiento quirúrgico.

Métodos quirúrgicos para el tratamiento de la osteocondrosis.

La cirugía para la osteocondrosis de la columna torácica es el último recurso. Los procedimientos neuroquirúrgicos requieren indicaciones especiales. La cirugía se realiza con mayor frecuencia en casos extremadamente graves y que ponen en peligro la vida. Si el síndrome de dolor no responde al tratamiento terapéutico y la movilidad se ve cada vez más afectada, se extirpa la hernia. Las complicaciones son posibles durante y después de la operación. La rehabilitación posoperatoria incluye métodos de terapia conservadora y ortopedia y puede durar indefinidamente.

Es importante recordar que las enfermedades degenerativas del sistema musculoesquelético pueden provocar discapacidad si no se tratan adecuadamente. El dolor puede volverse crónico y la osteocondrosis puede extenderse a múltiples partes de la columna. La prevención oportuna de los síntomas y el tratamiento de la osteocondrosis torácica en las etapas iniciales pueden prevenir un mayor desarrollo de la enfermedad.

prevención

La prevención de la osteocondrosis torácica debe comenzar en la adolescencia, cuando se forma el aparato osteocondral y aparecen desviaciones de la norma en forma de escoliosis. El desarrollo físico durante esta época es importante, pero sin sobrecargar. Una carga equilibrada en todos los grupos de músculos y el desarrollo de la coordinación son las recomendaciones más importantes.

Dado que la enfermedad se desarrolla con la edad, es necesario prestar atención a las actividades deportivas, pero sin un entrenamiento de fuerza intensivo. La natación se considera la forma óptima de actividad física.

Los médicos de la clínica le ayudarán a elegir un programa de recuperación.

Los médicos de la clínica ofrecen consultas preliminares gratuitas. Evalúan el estado de la columna mediante imágenes de resonancia magnética, informan sobre la probabilidad de reabsorción y la posibilidad de tratamiento.